El sensor de ritmo cardíaco del Galaxy S8 tiene una mejor utilidad que quizás no conozcas
Samsung lleva incluyendo sensores de ritmo cardíaco en la parte trasera de sus smartphones estrella desde hace ya varios años, aunque probablemente la mayoría de los usuarios desconozcan su existencia o, simplemente, no lo utilicen nunca.
Sin embargo, Samsung ha dotado a este sensor de una utilidad bastante interesante, especialmente en un teléfono tan grande como el Galaxy S8 o S8+. A la hora de hacer un selfie, muchas veces es complicado alcanzar el botón de disparo con los dedos, y utilizar los botones de volumen suelen hacer que el teléfono se mueva y, por tanto, las fotografías salgan borrosas (sobre todo por la noche).
Ahí es donde el sensor de ritmo cardíaco resulta bastante útil, ya que puedes utilizarlo en lugar del botón de disparo para tomar un selfie. Si la cámara frontal ha detectado una cara, basta con tocar el sensor de ritmo cardíaco para tomar una fotografía.
El único problema es que es posible que manches la otra cámara, la trasera, ya que está justo al lado, pero si usas el lector de ritmo cardíaco, que está también muy cerca, estarás acostumbrado a limpiarla.
Esta funcionalidad no es nueva, sino que debutó con el Galaxy Note 4, pero ahora es más útil que nunca dadas las dimensiones del Galaxy S8+. | Fuente: Phone Arena