Análisis de los Apple AirPods y opinión
Cuando Apple presentó el iPhone 7, muchos se echaron las manos a la cabeza al descubrir que no tenía conector de auriculares. El futuro para Apple es inalámbrico, y por ello la compañía decidió lanzar una versión sin hilos de sus auriculares EarPods.
Los nuevos auriculares inalámbricos han sido convenientemente bautizados como AirPods y, además de servir para escuchar música, poseen micrófonos para mantener conversaciones e interactuar con Siri.
Apple busca siempre la simplicidad en sus productos y, una vez más, se ha entregado a fondo para asegurar que la experiencia de utilizar los AirPods sea lo más simple posible, tanto a la hora de enlazarlos con nuestros dispositivos Apple como a la hora de utilizarlos e incluso de cargar su batería.
De hecho, la compañía describe el funcionamiento de los AirPods como «por arte de magia» y, como veremos en este análisis, tiene algunas buenas razones para afirmarlo.
Hemos tenido oportunidad de probar a fondo los AirPods durante varios días y, a continuación, os presentamos nuestras conclusiones.
Emparejamiento con nuestros dispositivos
Cualquier que haya utilizado unos auriculares o un altavoz Bluetooth con su iPhone sabe que el proceso de emparejamiento no suele ser algo rápido y fácil.
No lo digo solamente por el emparejamiento inicial, que suele requerir varios pasos — activar modo descubrimiento en el dispositivo, buscar dispositivo desde el smartphone, esperar a que aparezca, confirmar emparejamiento, etc. — sino que, con el tiempo, no es raro que tengamos que volver a emparejarlos de nuevo para poder utilizarlos, sobre todo si los usamos con varios dispositivos.
Apple ha diseñado los AirPods pensando en la simplicidad, y por ello ha querido librar al usuario de todas estas molestias creando un proceso de emparejamiento realmente sencillo y «mágico».
Basta con abrir la caja de los AirPods la primera vez que los utilizas cerca de un iPhone para que el teléfono los detecte y queden emparejados de por vida (o hasta que decidas romper la unión, como ocurre con la vida misma).
Aún más, una vez que los AirPods se emparejan con tu iPhone, lo hacen con todos los dispositivos asociados a esa misma cuenta de Apple – sean un iPhone, un iPad, un ordenador Mac o incluso con el Apple Watch.
Por ejemplo, si después de haberlos emparejado con el iPhone abrimos nuestro ordenador Mac, veremos que aparecen como un nuevo dispositivo de sonido listo para usar.
Hemos probado los AirPods con un iPhone 7 Plus, un iPad Pro, un Apple Watch Series 2 y un MacBook Pro (2016) y en todos ellos aparecían como una posible salida de sonido sin necesidad de haberlo emparejado. Ahora bien, en cada dispositivo tendrás que seleccionar «AirPods» en el apartado de salidas de sonido ya que, de lo contrario, el sonido se reproducirá por los altavoces internos.
Si un día decides emparejarlos con un dispositivo asociado a otra cuenta de Apple diferente, basta con que mantengas el botón del estuche apretado unos segundos y comenzará de nuevo el proceso de emparejamiento.
Los AirPods también funcionan con otros dispositivos Bluetooth – como un smartphone Android – pero muchas de las funcionalidades «mágicas» que justifican su precio no están presentes.
Comodidad y facilidad de uso
Los AirPods tienen la apariencia de unos EarPods a los que hubiéramos cortado los cables. Los dos auriculares AirPods son completamente independientes, de forma que podemos decidir colocarnos solo uno de los dos o ambos.
Como muchos auriculares, los AirPods se insertan en el orificio del oído. Cuentan con un pequeño cilindro que apunta hacia la boca y un micrófono en el extremo.
Basta con introducir los AirPods en el oído para que un sonidito nos avise de que ya están listos para funcionar y, cuando estamos escuchando música, es suficiente con quitárselos para se interrumpa. Si los vuelves a introducir, la música continúa como por arte de magia.
Como comentaremos más adelante, la forma de cargar los AirPods es a través de su estuche. El estuche es el lugar en el que deberías guardar los AirPods cuando no estén en tus oídos ya que, debido a su pequeño tamaño, corres riesgo de perderlos si los llevas sueltos en un bolsillo o si los dejas encima de una mesa. El estuche es lo bastante pequeño como para que quepa en un bolsillo y cuenta con unos imanes que hacen que los AirPods no se salgan ni siquiera al colocar el estuche boca abajo.
La gran pregunta que muchos nos hicimos cuando vimos los AirPods por primera vez fue si se mantendrían firmes en el oído, o correrían un alto riesgo de caerse al menor movimiento brusco.
En mi experiencia, los AirPods se sienten seguros en el oído, y por más que he probado a forzar su caída, se han mantenido inmóviles en todo momento. Ahora bien, no he visto a Apple publicitar los AirPods para actividades deportivas, por lo que es posible que si haces ejercicio durante un largo tiempo pierdan la sujeción.
A continuación podéis ver un vídeo de nuestra compañera Sonia poniendo a prueba la firmeza de los AirPods en el oído.
Calidad de sonido y funcionalidades
En términos de calidad de sonido, los AirPods suenan bastante parecido a los EarPods que vienen en la caja de cualquier iPhone. El sobreprecio que tenemos que pagar por estos auriculares no se justifica por una mejor calidad de sonido, sino por las funcionalidades adicionales.
De hecho, de igual manera que los EarPods no son unos auriculares pensados para audiófilos, los AirPods tampoco lo son. Si tu oído no es demasiado exigente y consideras que la calidad de sonido de los EarPods es suficientemente buena, los AirPods no te decepcionarán.
Mi percepción es que los AirPods suenan bastante bien, aunque obviamente no reproducen todos los matices de sonido que se pueden apreciar en unos auriculares más caros. Poseen una respuesta bastante correcta a todas las frecuencias, aunque si quieres unos bajos más agresivos tendrás que hacerte con unos Beats.
En las pruebas que hemos realizado, los AirPods han permanecido todo el tiempo emparejados con el teléfono, sin experimentar ningún corte de sonido, algo que no podemos decir de todos los auriculares Bluetooth que hemos probado.
Podemos utilizar ambos auriculares a la vez o llevar puesto solamente uno de ellos. También podemos prestar un AirPod a otra persona si queremos compartir nuestra música a la vez.
Además de escuchar música, los AirPods permiten llevar a cabo llamadas gracias a que cada auricular incorpora un micrófono. Si llevamos los auriculares puestos cuando entra una llamada, un doble toque en uno de los auriculares será suficiente para descolgar la llamada.
Los AirPods son capaces de detectar que estás hablando gracias a la detección de pequeñas vibraciones, y la tecnología de cancelación de ruido de Apple funciona de maravilla. Los micrófonos se centran en captar el sonido de tu voz, filtrando cualquier ruido externo de forma que se capte tu voz claramente.
Para probar la calidad de los micrófonos de los AirPods hemos probado a grabar dos llamadas, una en un entorno poco ruidoso y otra en un entorno muy ruidoso. A su vez, cada llamada ha sido realizada dos veces: una primera prueba desde un iPhone y una segunda desde los AirPods.
La primera llamada se realiza en un entorno poco ruidoso, donde apenas se nota diferencia en utilizar el iPhone o los AirPods:
La segunda llamada se realiza en un entorno muy ruidoso, junto a un altavoz con música. Aquí sí que se aprecia que los AirPods dejan pasar mucho más la música que el micrófono deel iPhone.
Otra de las funcionalidades que incorporan los AirPods es la posibilidad de interactuar con Siri. Basta con golpear dos veces uno de los auriculares para que Siri se ponga a escuchar y responda a nuestras órdenes. Esto resulta muy cómodo, por ejemplo, para realizar una llamada pidiendo a Siri que marque el número de teléfono de un determinado contacto.
Siri también permite controlar la reproducción de la música con la voz. Si quieres subir o bajar el volumen, debes dar un doble toque al auricular para que se pare la música y conteste Siri, y a continuación pedirle que suba el volumen. Lo mismo ocurre para saltar una pista, aunque este comando no funciona con Spotify sino solamente con Apple Music.
Si prefieres prescindir de Siri, también puedes configurarlo para que un doble toque en un AirPod reproduzca o pause una canción.
En este aspecto hubiera sido más cómodo contar con algún control físico que permitiera subir y bajar el volumen sin tener que recurrir a Siri – por ejemplo arrastrando el dedo verticalmente por la superficie del AirPod.
Autonomía y carga de batería
Los AirPods poseen una autonomía de 5 horas, bastante elevada para unos auriculares de este tamaño, y se cargan cuando están dentro de su estuche, que es capaz de almacenar más de 24 horas de carga. Con solo 15 minutos dentro del estuche, los AirPods consiguen 3 horas de autonomía.
Si, como hemos comentado, guardas siempre los AirPods en el estuche, te resultará muy fácil mantenerlos siempre al máximo de carga. Cada cierto tiempo tendrás que utilizar el conector Lightning del estuche para recargar su batería interna.
Conocer la carga de los AirPods y de su estuche es tan sencillo como abrir el estuche cerca del iPhone. Una panel con la información de batería restante aparecerá en la parte inferior de la pantalla del iPhone como por arte de magia.
Precio y disponibilidad
El precio de los AirPods es 179 euros, un precio bastante más elevado que el de los EarPods convencionales, que cuestan 35 euros.
Como ya hemos comentado, el sobreprecio de los AirPods no se debe a una mayor calidad de sonido, sino a la gran comodidad que supone utilizar unos auriculares sin cables, que se conectan de forma sencilla a cualquiera de nuestros dispositivos Apple y se cargan en su estuche.
En caso de que pierdas uno de ellos, Apple ha publicado en su web en Estados Unidos que el coste de un solo auricular es de 69 dólares. Lamentablemente esta información no aparece en la página web de Apple en Espala, por lo que no sabemos el precio que tendrá un reemplazo en nuestro país.
Los AirPods están a la venta en las tiendas Apple a partir de hoy, 19 de diciembre, y desde hace unos días pueden adquirirse también en la web de Apple.
Conclusiones
Una de las palabras que más se repiten en la página web de los AirPods es «magia», y es que Apple ha puesto todo su empeño en que la experiencia de utilizar estos auriculares Bluetooth con sus dispositivos sea lo más sencilla (y mágica) posible.
El proceso de emparejamiento es casi «mágico», ya que basta con abrir el estuche cerca de un iPhone para que los auriculares queden enlazados, no solamente con dicho dispositivo, sino con todos los que estén asociados a tu usuario de Apple – bien sea un iPhone, un iPad, un ordenador Mac o un Apple Watch.
En el día a día, el uso de los auriculares también tiene algo de magia. Introduces los AirPods en el oído y la música comienza a reproducirse sin hacer nada. Los sacas del oído y la música se interrumpe. Los golpeas dos veces y Siri susurra en tu oído. Más fácil, imposible.
Incluso el proceso de carga tiene su propia magia gracias a un estuche capaz de almacenar carga para 24 horas. Las 5 horas de autonomía de los propios AirPods no está nada mal para su tamaño, aunque debes acostumbrarte a guardarlos siempre en el estuche para que se recarguen al dejar de utilizarlos – además de para no perderlos por que son muy pequeños.
A pesar de que el aspecto de los AirPods sugiere que se te van a caer de un momento a otro, en nuestras pruebas se han mantenido firmes en el oído a pesar de haber intentado despegarlos con saltos, movimientos bruscos de cabeza y otras piruetas.
La calidad del sonido de los AirPods es buena, aunque no mejor de la que la ofrecen los EarPods tradicionales. Donde sí que vemos un avance importante es en el rendimiento de los micrófonos, ya que los AirPods cuentan con un sistema de cancelación de ruido bastante eficaz.
Ahora bien, la magia tiene un precio, y los AirPods harán que tengas que rascarte el bolsillo con su etiqueta de 179 euros.
Lo mejor:
- Comodidad en el oído y ausencia de cables
- Excelente sujeción al oído incluso aunque hagamos movimientos bruscos con la cabeza
- Proceso de emparejamiento al iPhone (y al resto de tus dispositivos) muy sencillo y automático
- Comodidad de uso en el día a día – basta con introducirlos en el oído para comenzar a escuchar música y extraerlos para que se pare
- Buena cancelación de ruido mediante los micrófonos duales, uno en cada auricular
- Activación de Siri sencilla con un doble toque en cualquier de los dos auriculares
- Buena autonomía, que se ve mejorada gracias a la capacidad de carga del propio estuche
Lo peor:
- Ausencia de controles físicos para subir/bajar volumen o avanzar/retroceder una pista de música
- Una cosa más que tenemos que acordarnos de cargar
- Precio elevado
Nota: Los AirPods han sido cedidos amablemente por Apple España para la realización de este análisis.