Análisis de Samsung Galaxy S5 y prueba a fondo
Samsung siempre despierta una gran expectación con el lanzamiento anual de su buque insignia. Desde hace años los teléfonos Galaxy S representan lo más avanzando del momento en el mundo Android y, por tanto, frente a ellos se comparan los terminales de gama alta de otros fabricantes.
Hace unas semanas Samsung nos invitó a probar el Galaxy S5 durante una hora antes de su lanzamiento oficial, y pudimos examinar de primera mano las principales novedades que incorpora: lector de huella dactilar, protección frente a agua, sensor de ritmo cardíaco, modo privado, modo de ultrahorro de energía, etc.
Ahora hemos tenido la oportunidad de utilizar el Galaxy S5 durante varias semanas, lo que nos ha permitido probar a fondo todas sus funcionalidades y emplearlo como terminal principal durante un tiempo. A continuación os contamos nuestras impresiones al respecto.
Diseño y construcción
Uno de los aspectos más criticados a Samsung sobre sus teléfonos de gama alta es el uso recurrente de plástico, un material que se considera poco sofisticado y por tanto más apropiado para terminales de gama media o baja.
Otros teléfonos de gama alta – como el HTC One M8, el Sony Xperia Z2 o el iPhone 5s – recurren a otros materiales como el aluminio o el vidrio.
Aunque Samsung se ha mantenido fiel al uso del plástico en sus Galaxy S, algunos de sus últimos dispositivos como el Galaxy Note 3 o los tablets Galaxy Tab PRO poseen una cubierta de imitación de piel en la parte trasera. Si bien se pensó que el Galaxy S5 podría heredar este diseño, no ha sido así.
El aspecto del Galaxy S5 es bastante parecido al del terminal del año pasado, el Galaxy S4, especialmente en la parte frontal y en los laterales. La parte trasera es la que ha sufrido un mayor cambio, con un aspecto menos plasticoso que las de modelos anteriores y un buen agarre gracias a una textura de pequeños puntos.
A mí particularmente el aspecto del Galaxy S5 no me disgusta, aunque reconozco que su diseño y construcción no son tan cuidados y llamativos como los del HTC One M8 o el iPhone 5s.
En cuanto a dimensiones y peso, Samsung ha vuelto a hacer un gran trabajo con el Galaxy S5. El uso de plástico contribuye a que el peso del terminal, 145 gramos, sea menor que otros teléfonos de tamaño similar. Su grosor de 8,1 mm también lo convierte en uno de los teléfonos más delgados del momento, como se puede ver en la tabla adjunta.
Si lo comparamos con el HTC One M8, el Galaxy S5 posee un menor tamaño y grosor aun cuando la pantalla es ligeramente mayor (5,2″ vs. 5″). En cuanto al peso, el HTC One M8 también es más pesado que el Galaxy S5 debido al uso de metal en lugar de plástico.
La parte de delante del Samsung Galaxy S5 está ocupada principalmente por la pantalla, cuyos marcos laterales son bastante estrechos.
Encima de la pantalla encontramos el logotipo de Samsung, el altavoz para el oído, la cámara frontal, el generoso LED de notificaciones (¡bien por mantenerlo!) y los sensores habituales de proximidad, luz y gestos.
En la parte inferior se encuentra el botón físico de Inicio y a los lados los botones capacitivos de Aplicaciones Recientes y Atrás, que se iluminan.
A pesar de que muchos fabricantes están optando por botones virtuales en la propia pantalla, Samsung sigue apostando por botones físicos o capacitivos.
Esto puede deberse a que Samsung ha incorporado un lector de huella digital en el botón de Inicio, por lo que el espacio lo iba a ocupar igualmente.
En la parte de atrás encontramos la cubierta trasera de plástico, que como es habitual en los teléfonos Galaxy se puede retirar para tener acceso a la batería. Además en el interior del teléfono encontramos las ranuras de micro-SIM y micro-SD.
En la zona superior de la tapa encontramos la cámara principal, que sobresale ligeramente de la superficie. Aunque el cristal que protege la cámara parece ligeramente hundido, no nos atrevemos a decir que no haya riesgo de que se raye si se apoya boca abajo con frecuencia.
Debajo de la cámara encontramos el flash y, junto a él, el sensor de ritmo cardíaco del que hablaremos más adelante.
En el centro del teléfono se encuentra grabado el logotipo de Samsung y en la parte inferior encontramos el altavoz, de pequeño tamaño. La posición del altavoz no es la mejor ya que al estar el teléfono apoyado boca abajo se amortigua el sonido.
En el lateral derecho encontramos el botón de encendido, que resulta muy cómodo de alcanzar con el pulgar al sostener el teléfono en la mano. Otros teléfonos optan por situarlo en la parte superior, pero con estos tamaños de pantalla resulta complicado apretarlo.
En el lateral izquierdo encontramos el botón de volumen, de una sola pieza, que resulta fácil de manejar.
En la parte superior encontramos el emisor de infrarrojos, para controlar un televisor u otro dispositivo, así como el conector de auriculares.
En la parte inferior encontramos el conector micro-USB 3.0 que parece estar dividido en dos conectores. En realidad lo que ocurre es que es también compatible con conectores micro-USB 2.0, que son los que habitualmente utilizamos en los teléfonos Android.
El uso de un conector micro-USB 3.0 permite conseguir velocidades de transferencia más rápidas y una mayor velocidad de carga de la batería. Este conector se encuentra normalmente oculto tras una tapa que me ha resultado algo incómoda de abrir, pero es necesaria para que el Galaxy S5 sea resistente al agua.
Dado que es bastante frecuente que tengamos que abrir y cerrar esta tapa para cargar el teléfono, hubiéramos agradecido que el Samsung Galaxy S5 incorporase carga inalámbrica Qi de serie.
Como comentábamos, Samsung se ha sumado a la moda de la resistencia al agua y polvo y el nuevo Galaxy S5 posee la certificación IP67. El segundo dígito ’7′ implica que el Galaxy S5 soporta sin filtración alguna la inmersión completa a 1 metro durante 30 minutos.
Se trata de un nivel de sellado algo inferior al del Sony Xperia Z2, que posee certificación IP58. De hecho Samsung afirma que el teléfono está protegido frente a sudor, lluvia y líquidos, pero no hace publicidad de que sea sumergible.
Nosotros hemos probado a darle un chapuzón y el teléfono lo ha resistido perfectamente. De hecho, podríamos pensar en utilizar el Galaxy S5 como una cámara acuática y hacer fotos debajo del agua.
Pantalla
El Samsung Galaxy S5 ha incrementado ligeramente el tamaño de su pantalla respecto al Samsung Galaxy S4 ya que ha pasado de 5″ a 5,1″ pero manteniendo la misma resolución de 1920 x 1080 píxeles.
La pantalla ahora está recubierta por Gorilla Glass 3, la nueva generación del sistema más famoso de protección de pantallas frente a arañazos.
El incremento de tamaño de pantalla manteniendo la misma resolución supone un ligero descenso de la densidad de píxeles a 432 ppp. En todo caso la densidad es tan elevada que los píxeles individuales son totalmente indistinguibles.
Dado que el ojo humano sin entrenar no parecer ser capaz de distinguir por encima de 287 ppp, cualquier resolución que ofrezca una densidades de píxeles muy por encima de 300 ppp es más un reclamo publicitario que una característica a valorar, como indicamos en nuestra guía sobre pantallas.
Por el momento los últimos lanzamientos de Samsung, Sony, LG y HTC siguen manteniendo la resolución 1080p, aunque hay rumores sobre versiones mejoradas del Samsung Galaxy S5 y del HTC One M8 que podrían llevar pantalla QHD, así como el próximo LG G3.
En mi opinión el panel Super AMOLED del Samsung Galaxy S5 se ve de maravilla, y así lo constata también un informe de DisplayMate que lo sitúa como el teléfono con mejor pantalla del momento.
La elevada densidad de píxeles hace que la pantalla posea una gran nitidez, donde no se aprecian los píxeles individuales, y la reproducción de los colores es igualmente excelente.
Los ángulos de visión son muy amplios y la pantalla puede contemplarse perfectamente desde ángulos muy extremos, sin rastros del tinte azul que se apreciaban en modelos anteriores. El brillo de la pantalla también es elevado y puede utilizarse sin problemas a plena luz del día.
Como no podía ser de otra forma al tratarse de una pantalla AMOLED, los negros son realmente negros en el Galaxy S5. Aunque a simple vista es difícil notar la diferencia respecto a una pantalla LCD como la del HTC One M8, en una habitación a oscuras salta a la vista.
El Galaxy S5 posee un modo de pantalla llamado Adapt Display que está activado por defecto y optimiza automáticamente la nitidez, saturación y rango de la pantalla para ciertas aplicaciones como Galería, Cámara, Internet, Vídeo, etc.
Por último, la pantalla también admite activar un modo de sensibilidad táctil aumentada que permite utilizar el dispositivo con guantes, algo que puede ser útil en invierno.
Hardware y rendimiento
El Samsung Galaxy S5 posee un procesador Snapdragon 801 con cuatro núcleos a 2,5 GHz y GPU Adreno 330, lo que lo convierte en el teléfono más potente del mercado junto a otros como el OnePlus One.
Se trata de un procesador algo más rápido que el que lleva el Sony Xperia Z2 y el HTC One M8, aunque en la práctica la diferencia resulta inapreciable.
De hecho el procesador Snapdragon 801 es una pequeña mejora del Snapdragon 800, con los mismos componentes y la misma eficiencia energética, solo que corriendo a una frecuencia algo superior.
Por tanto los nuevos teléfonos de 2014 no son mucho más rápidos que los que aparecieron en 2013 como el LG G2 o el Nexus 5.
El Galaxy S5 posee 2 GB de memoria RAM, suficiente para mover con soltura cualquier aplicación y no tener problemas a la hora de conmutar entre una y otra.
Ahora bien, resulta sorprendente que Samsung no haya incluido 3GB de RAM, dado que el Samsung Galaxy Note 3 ya venía con esta cantidad y otros teléfonos de gama alta como el Sony Xperia Z2 también la incorporan. Suponemos que Samsung habrá llegado a la conclusión de que el incremento de 2 a 3GB no trae beneficios apreciables al usuario.
Durante las pruebas que hemos realizado el teléfono ha respondido con rapidez y en ningún momento hemos notado que haya sacado aplicaciones de ejecución por falta de memoria.
En el benchmark Quadrant, el Samsung Galaxy S5 obtiene una puntuación de 22.781 puntos, una marca muy elevada aunque curiosamente por debajo del HTC One M8.
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En el benchmark AnTuTu ha dado un resultado de 34.681 puntos, de nuevo unos resultados muy altos.
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En el benchmark Geekbench ha conseguido 944/2.851 en las pruebas mono/multi-núcleo, unos resultados a la altura de los teléfonos más potentes.
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En la prueba de navegador BrowserMark 2.0 ha dado como resultado 3.431 puntos, un 97% mejor que los navegadores de móviles y un resultado muy superior a otros teléfonos.
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El test de Javacript SunSpider 1.0 ha dado 397 ms. De nuevo se trata de un resultado espectacular que confirma la gran potencia de este terminal.
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El test 3DMark centrado en las capacidades gráficas del teléfono tampoco ha decepcionado sino que su puntuación de 18.491 puntos en el test Ice Storm Unlimited es una excelente marca, aunque curiosamente por debajo del HTC One M8. Los tests Ice Storm y Ice Storm Extreme, se quedan cortos para la potencia de este teléfono.
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Estos excelentes resultados confirman que el Samsung Galaxy S5 es uno de los teléfonos más potentes del momento. Esto se traduce en que el teléfono responde rápidamente a las órdenes y su manejo es extremadamente fluido, sin parones en aplicaciones o juegos exigentes.
Como suele ocurrir con los teléfonos de gama alta, el Samsung Galaxy S5 tiende a calentarse frecuentemente por detrás tras períodos prolongados de uso o al jugar a algún juego exigente.
En los juegos que hemos probado, como Asphalt 8, el rendimiento del teléfono ha sido excelente y el juego se mueve con una tasa de imágenes por segundo muy elevada.
Lo mismo ocurre con Dead Trigger 2, un juego especialmente indicado para probar las capacidades 3D ya que incluye elementos gráficos avanzados como sombras en tiempo real, reflejos en el agua y efectos de luz. El Galaxy S5 es capaz de mover el juego con gran soltura.
El Samsung Galaxy S5 posee 16 o 32 GB de almacenamiento interno, si bien es posible añadir una tarjeta micro-SD de hasta 128 GB de capacidad.
Por otro lado, gracias a un acuerdo con Dropbox, se obtienen 50GB adicionales de almacenamiento en la nube durante dos años, o 50GB en Box durante seis meses.
En el aspecto de conectividad, el Samsung Galaxy S5 va bien servido ya soporta Wi-Fi 802.11 a/b/g/n/ac, Bluetooth 4.0, 3G/HSPA+, 4G/LTE, radio FM, DLNA, MHL, NFC y GPS-A. Lamentablemente, al igual que ocurría con el Galaxy S4, no posee radio FM, lo cual algunos usuarios lo encontrarán como una limitación importante.
En las pruebas que hemos realizado la velocidad de red tanto por Wi-Fi como por 4G fueron muy satisfactorias. El Samsung Galaxy S5 alcanzó los 39 Mbps de bajada y 10 Mbps de subida en Wi-Fi con una conexión de fibra óptica 100/10. En la prueba de 4G, se alcanzaron los 28 Mbps de bajada y 19 Mbps de subida con una rápida conexión 4G de Vodafone.
La batería del Samsung Galaxy S5 es reemplazable y posee una capacidad de 2.800 mAh, lo que supone un incremento de 200 mAh respecto al Galaxy S4. Sigue estando por debajo de otros teléfonos como el LG G2, el Sony Xperia Z1 o el Sony Xperia Z2, si bien estos no tienen una batería reemplazable.
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Samsung ha incorporado dos modos de ahorro energía: el modo normal y el modo ultrahorro de energía.
El modo normal de ahorro permite bloquear datos de fondo, desactivar la respuesta de vibración, apagar la pantalla al cabo de tres segundos, limitar el rendimiento máximo de la CPU, reducir la velocidad de los fotogramas de la pantalla, apagar la luz del teclado táctil, desactivar GPS o activar el modo escala de grises que pone la pantalla en blanco y negro.
El modo ultrahorro es una de las novedades importantes que ha incorporado Samsung en el Galaxy S5, que incrementa significativamente la autonomía del teléfono en caso de necesidad.
Este modo ahorra batería aplicando un tema de escala de grises, simplificando al máximo la pantalla de inicio, limitando el número de aplicaciones utilizables a las esenciales y aquellas seleccionadas por el usuario, desactivando los datos móviles al apagar la pantalla y desactivando las funciones de conectividad WiFi yy Bluetooth.
Con una carga completa al 100%, el teléfono puede aguantar casi 12 días en el modo de ultrahorro. Lógicamente no se trata de un modo que uno quiera tener activo por defecto, pero resulta muy útil cuando estamos en los últimos minutos de autonomía y queremos mantener el teléfono activo durante unas horas.
Lamentablemente el teléfono queda incomunicado por 3G/4G y WiFi al apagar la pantalla, por lo que no recibimos ninguna notificación de correo electrónico, mensaje de WhatsApp o de cualquier otro tipo cuando el teléfono está en reposo hasta el momento de encender la pantalla, cuando se activa 3G/4G.
En el día a día, sin ningún modo de ahorro activado, el teléfono aguanta sin problemas un día de uso, pero si hacemos un uso muy intensivo necesitaremos recargarlo antes de llegar a la noche.
En nuestra prueba habitual consistente en dejar reproducir un vídeo en HD indefinidamente con el brillo a nivel máximo, el Samsung Galaxy S5 ha aguantado 11 horas y cuarto, una cantidad muy elevada por encima de otros teléfonos que hemos probado y al mismo nivel que el Samsung Galaxy Note 3.
Interfaz y funcionalidades
El Galaxy S5 corre Android 4.4.2 KitKat y, por encima del sistema operativo, Samsung ha incorporado su propia capa de personalización UX, que se ha visto mejorada en su última versión.
La pantalla de ajustes presenta un aspecto bastante diferente respecto a la del Galaxy S4, ya que Samsung ha pasado de mostrar líneas de texto con un pequeño icono para cada ajuste a mostrar ahora una colorida matriz de iconos circulares que permiten acceder a cada ajuste.
Por defecto se muestran en una sola pantalla todos los ajustes organizados por secciones, pero también es posible activar una vista de pestañas. Samsung también permite crear una lista de ajustes rápidos que se muestran en la parte superior.
Otro aspecto que ha cambiado es la barra de notificaciones.
En la parte superior podemos ver una hilera de iconos circulares que nos dan acceso rápido a ajustes, y que se puede expandir para mostrar más ajustes.
La barra de notificaciones también permite ajustar el brillo de la pantalla, así como acceder a S Finder y Conexión Rápida.
S Finder es un buscador integral del teléfono, que nos permite localizar por nombre aplicaciones, ajustes del teléfono, ficheros, notas, conversaciones, imágenes, música y vídeos. Conexión Rápida permite conectar al teléfono a dispositivos cercanos como televisores, teléfonos, tablets a través de la red WiFi
La pantalla de bloqueo también ha cambiado ligeramente.
Ahora no solamente podemos ver en la parte superior la hora, la fecha e información del propietario sino también la información meteorológica y el número de pasos que hemos recorrido según el podómetro integrado.
Desde la pantalla de bloqueo también podemos acceder rápidamente a la aplicación de cámara de fotos gracias a un acceso directo en la parte inferior derecha de la pantalla.
Ahora bien, la implementación de este acceso directo a la cámara no es demasiado buena y en ocasiones pensamos que lo hemos activado cuando en realidad no hemos arrastrado el icono lo suficiente.
La pantalla principal no ha sufrido demasiados cambios estéticos respecto al Galaxy S4. Por defecto encontramos tres pantallas de iconos y widgets pero podemos añadir más fácilmente.
La principal novedad de la pantalla principal es My Magazine, una nueva pantalla que aparece al arrastrar a la derecha la primera de las pantallas.
Samsung se ha unido a la moda de los agregadores de contenidos – como BlinkFeed de HTC – y ha integrado Flipboard en el propio sistema operativo.
My Magazine muestra contenidos de Flipboard organizados por temas seleccionables por el usuario – artes y cultura, trabajo, nuevo y destacado, noticias, fotos y diseño, deportes, estilo, tecnología y ciencia, libros, selección de hoy, contenido inglés, y vivir y viajes – y actualizaciones de redes sociales – 500 píxeles, Flickr, Google+, LinkedIn, RenRen, SINA Weibo, Tumblr, Twitter y YouTube.
Los temas no son muy específicos, por lo que si seleccionas deportes recibirás noticias de todo tipo de deportes, incluso de aquellos que no sigues. Por suerte al pulsar sobre alguno de estos contenidos accedes a la propia aplicación Flipboard, cuyas opciones de personalización son muy superiores.
Otra novedad del interfaz heredada de la gama Note es la caja de herramientas, que consiste en un círculo flotante semi-transparente que se puede arrastrar a cualquier lugar de la pantalla. Al pulsar sobre él se despliegan varios iconos de acceso a aplicaciones, que pueden personalizarse fácilmente para poder acceder rápidamente a nuestras aplicaciones favoritas.
Aunque ya habíamos visto la función Multi Window en los tablets Samsung, es una novedad en el Galaxy S5.
Al activar esta funcionalidad en la parte izquierda de la pantalla aparece una solapa que, al ser pulsada, reconfigura la pantalla con dos ventanas en blanco a la derecha y una bandeja con iconos de nuestras aplicaciones a la izquierda.
Al arrastrar un icono de la bandeja a cualquier de las dos ventanas, la aplicación se abre en ella de forma que podemos utilizar dos aplicaciones a la vez, aunque con la limitación de tener poco espacio en la pantalla. La separación entre ambas ventanas puede moverse arriba y abajo fácilmente para ajustar el tamaño de cada una de ellas.
Una de las posibilidades que ofrece es que una vez arrastradas dos aplicaciones podemos asignar un nombre a este grupo de ventanas para poder recuperarlo posteriormente de forma sencilla. Tal y como se muestra en las capturas de ejemplo, en mi caso he encontrado esta función útil para utilizar otra aplicación mientras converso por WhatsApp.
Samsung también ha incorporado la función Screen Mirroring, que permite reproducir en un televisor contenidos de audio y vídeo de nuestro teléfono de forma inalámbrica. Esta funcionalidad ya estaba disponible en el Galaxy S4, pero Samsung nunca ha dado demasiadas explicaciones sobre cómo funciona.
Para utilizar Screen Mirroring es necesario que el televisor sea compatible con Miracast, el estándar de la industria que hay por detrás por esta tecnología. La mayor parte de los televisores Smart TV de los últimos dos o tres años soportan esta tecnología. En nuestro caso lo hemos probado con un televisor Samsung y hemos podido disfrutar de las fotografías en el televisor, como se puede ver en la siguiente imagen.
Una preocupación de algunos usuarios es que otras personas puedan curiosear en su teléfono cuando lo prestan para hacer una llamada, consultar una web o cualquier otro uso.
Samsung ha incorporado un Modo privado que permite que ciertos contenidos como imágenes y documentos solo estén disponibles cuando accedemos a este modo. En la captura de pantalla adjunta se puede ver cómo se añaden imágenes al modo privado.
Para poder acceder al modo privado debemos introducir una contraseña u otra forma de autenticación. Lamentablemente no es posible mover aplicaciones al modo privado, por lo que no podemos ocultar aplicaciones de mensajería o correo electrónico.
Una funcionalidad que ya vimos en el Galaxy S4 es la posibilidad de enviar mensajes de auxilio. Para ello es necesario designar previamente uno o varios contactos como principales, a los cuales se les enviará un mensaje de alerta si nos encontramos en una situación de emergencia y pulsamos la tecla de encendido tres veces rápidamente.
Samsung también ha incorporado Download Booster, una nueva funcionalidad que acelera las descargas por HTTP de ficheros grandes (más de 30MB) .
Esta funcionalidad hace uso de la red Wi-Fi y red móvil 3G/4G simultáneamente.
Para probar esta funcionalidad hemos descargado un fichero de prueba de 250MB de la web ThinkBroadband.com, y efectivamente la descarga se ha realizado simultáneamente a través de nuestra conexión WiFi y la red 4G de Vodafone, tal y como se puede apreciar en las capturas.
En la práctica, dado que los operadores imponen límites de descarga a alta velocidad, no parece probable que vayamos a querer hacer uso del tráfico 4G cuando tenemos disponible una red WiFi, por muy grande que sea el fichero.
Sin embargo existe otra funcionalidad llamada Cambio de Smart network que sí que nos parece más interesante, ya que cambia automáticamente entre redes móviles y WiFi para mantener una conexión de Internet estable.
Esta función resulta útil para evitar que nuestro teléfono se quede sin conexión a Internet al conectarse a una red WiFi con muy baja velocidad – bien sea porque estamos muy lejos del punto de acceso o porque es una red pública gratuita que no funciona adecuadamente.
La función Modo de bloqueo, que se puede ver en la imagen adjunta, permite desactivar avisos – llamadas entrantes, notificaciones o alarma – a determinadas horas, pudiendo establecer algunos contactos como permitidos para que sus notificaciones sí que lleguen.
Lamentablemente no permite escoger diferentes horarios según el día de la semana, algo que nos parece básico y fácil de implementar.
El Samsung Galaxy S5 también incorpora otras funcionalidades que ya vimos en el Galaxy S4 y que, por tanto, no vamos a detallar como:
- Operación con una mano, que ajusta el tamaño y diseño de la pantalla para controlar el dispositivo con una sola mano
- Control mediante movimientos y gestos:
- Air browse para desplazarse por páginas o listas moviendo la mano sobre el sensor en la dirección en la que queremos desplazarnos
- Direct call, que llama al contacto cuyos detalles están en pantalla simplemente con acercar el dispositivo al oído
- Smart alert, que hace vibrar al dispositivo cuando lo coja para avisar de llamadas perdidas y mensajes
- Silencio/pausa, que permite silenciar o pausar el teléfono cubriendo la pantalla con la mano o dando la vuelta al dispositivo.
- Desplazar palma para capturar, que permite realizar una captura de pantalla deslizando el lateral de la mano de un lado a otro de la pantalla.
- Air View, que previsualiza información deslizando un dedo por encima de la pantalla en aplicaciones como calendario, galería, vídeo o teléfono.
Lector de huella dactilar
Una de las funcionalidades nuevas más interesantes del Samsung Galaxy S5 es el lector de huella dactilar, que permite desbloquear el teléfono y realizar pagos de Paypal deslizando el dedo sobre el escáner dactilar que incorpora el botón de Inicio.
El sistema permite registrar hasta tres huellas dactilares, una cantidad que a mí me resulta algo escasa ya que al menos en mi caso acostumbro a desbloquear el teléfono con los dedos pulgares o índices indistintamente. Además, si queremos dar acceso a otros miembros de la familia, estamos bastante limitados.
El lector de huella funciona bastante bien, siendo capaz de reconocer la huella casi siempre aunque la deslicemos rápido o en ángulo. Ahora bien, en ocasiones falla y tenemos que pasar el dedo una o más veces hasta que reconoce nuestra huella.
El lector de huella dactilar del Galaxy S5 funciona mucho mejor que el del HTC One Max, cuya posición trasera y sensibilidad dejaban bastante que desear. Sin embargo, al compararlo con el del iPhone 5s, la cosa cambia.
Mi sensación es que el lector del Samsung Galaxy S5 está por debajo del de Apple en cuanto a tasa de acierto. Posiblemente se deba a que el lector del iPhone 5s no requiere deslizar el dedo sino que basta con apoyarlo encima, por lo que es menos propenso a problemas relacionados con la velocidad de deslizamiento.
Aplicaciones incluidas
Además de la aplicación My Magazine, de la que hemos hablado en el apartado de Interfaz, Samsung ha incorpora otras aplicaciones propias y de terceros al Galaxy S5.
Como era de esperar, una de las aplicaciones que encontramos es ChatOn, que permite realizar chats con otros usuarios. Desconozco si en otros países tendrá más tirón, pero desde luego en España la aplicación estrella es WhatsApp y no conozco a nadie que utilice ChatOn regularmente.
Samsung ha mejorado la aplicación S Health dedicada al cuidado de nuestra salud, que ya va por la versión 3.0. La aplicación hace uso del podómetro que incorpora el Galaxy S5 para medir nuestros pasos y, como novedad, también utiliza el sensor de ritmo cardíaco para registrar nuestra frecuencia cardíaca.
En efecto el Galaxy S5 incorpora un sensor del ritmo cardíaco junto al flash trasero que funciona colocando el dedo sobre él, iluminándolo con una luz y midiendo durante unos segundos los cambios causados por la circulación de la sangre al circular.
Dado que el período de medición es corto (unos ocho segundos), he notado mucha variabilidad en los resultados a pesar de tener cuidado a la hora de colocar el dedo correctamente. Además, solo es posible medir el ritmo cardíaco en reposo, pero no durante un ejercicio dada la dificultad de apoyar el dedo y mantenerlo quieto durante varios segundos, lo que hace perder utilidad a esta funcionalidad.
Samsung ha incluido una vez más S Voice, su asistente personal tipo «Siri» que responde a órdenes de voz como «llamar Carlos móvil», «grabar voz», «poner la alarma a las 6 de la mañana», «encender Wi-Fi» o «navegar a Sant Cugat, Barcelona.»
Personalmente no encuentro mucha utilidad al uso de asistentes de voz, independientemente de que se trate de S Voice, Siri, Cortana o cualquier otro.
Otra de las aplicaciones que encontramos es Smart Remote, que muestra la parrilla de programación de televisión, ofrece recomendaciones sobre programas de televisión y permite manejar remotamente un televisor gracias al emisor de infrarrojos que incorpora.
Para que el sistema sea efectivo es necesario responder inicialmente a diversas preguntas sobre la ubicación del usuario y sus preferencias televisivas, así como configurar la televisión.
Group Play es una aplicación que ya vimos en el Galaxy S4 y que permite compartir contenidos con varios teléfonos simultáneamente.
La aplicación ha ido evolucionando y ahora permite compartir imágenes, documentos, música, vídeo e incluso grabar secuencias de vídeo en grupo. Además se pueden adquirir nuevas aplicaciones y juegos que aprovechan esta funcionalidad en la Tienda.
Como novedad, el Galaxy S5 incorpora la grabación de vídeo en grupo. El que toma el rol de Director puede ver todas las cámaras durante la grabación y después de ella, así como editar y combinar las mejores secuencias.
Lamentablemente no teníamos otro Samsung Galaxy S5 disponible, por lo que no hemos podido probar la funcionalidad de Group Play.
Otra aplicación bien conocida es S Note, que permite crear y organizar notas de texto o manuscritas, así como adjuntar grabaciones de voz, fotografías, imágenes, mapas y otros elementos. El sistema se integra con Evernote para mantener las notas sincronizadas entre dicho servicio y el teléfono.
Optical Reader es un reconocedor de caracteres que nos permite hacer una fotografía a un texto y convertirlo en caracteres, así como leer el texto que hemos capturado.
S Translator es un traductor entre diversos idiomas (alemán, chino, coreano, español, francés, inglés de EE.UU., inglés de Reino Unido, italiano, japonés, portugués brasileño y ruso) que traduce frases entre diversos idiomas pero requiere conexión a Internet.
Afortunadamente Samsung no ha querido llenar el Galaxy S5 con aplicaciones que muchos usuarios jamás abrirán. El resto de aplicaciones que encontramos habitualmente en los teléfonos la marca ahora no están instaladas pero sí se encuentran disponibles para descargar en la tienda Samsung Apps dentro del apartado GALAXY Essentials, en caso de que alguien las eche de menos.
Por otro lado, Samsung sigue potenciando su tienda Samsung Apps de aplicaciones, aunque como ya hemos comentado en otros análisis no vemos que aporte nada de especial frente a Google Play.
Multimedia
En el aspecto sonoro el Samsung Galaxy S5 sigue sin destacar especialmente, sobre todo si lo comparamos con su rival HTC One M8 que incorpora dos altavoces estéreo en el frontal.
El Galaxy S5 solo posee un altavoz en la parte de atrás, por lo que cuando está apoyado de ese lado el sonido se amortigua y distorsiona.
El Samsung Galaxy S5 incorpora un reproductor de música muy completo, que permite visualizar las canciones por título, álbum, artista, carpeta, dispositivo (puede acceder a ficheros remotos) e incluso por estilo gracias a algo que llaman Music Square.
Music Square, para quienes no lo conozcan de otros dispositivos, clasifica las canciones en un cuadrante basándose en cuatro parámetros – emocionante, apasionado, alegre y tranquilo – y pulsando sobre un punto de ese cuadrante se reproducen las canciones de ese estilo.
El reproductor también incorpora otras funcionalidades interesantes como volumen inteligente para ajustar el volumen de cada pista al mismo nivel; letra para mostrar la letra de la canción; Sound Alive para ajustar la ecualización; y Adapt Sound para calibrar el sonido de los auriculares a la respuesta de nuestro oído. Ahora bien, el Galaxy S5 no es capaz de descargar la carátula de una canción automáticamente.
La aplicación Galería se utiliza para visualizar y reproducir las fotos y vídeos almacenados en el teléfono e incluso aquellas almacenadas en discos NAS conectados a la red o servicios en la nube como Dropbox, Facebook o Picasa.
Como curiosidad, además organizar las imágenes por hora o álbum, la aplicación es capaz de identificar ciertos tipos de imagen y filtrar por gente, paisaje, documentos, comida, vehículos y flores. Sin embargo los resultados son bastante mediocres.
La aplicación Galería también permite editar las imágenes mediante diversas funcionalidades:
- Estudio fotográfico, que permite rotar, recortar, cambiar tamaño, ajustar el tono (brillo, contraste, saturación, temperatura, etc.), aplicar efectos, eliminar ojos rojos, corregir brillo de la cara, desenfocar, añadir elementos decorativos, etc.
- Estudio de collage, que permite combinar hasta seis imágenes creando un collage.
- Disparo y más, que permite editar fotos tomadas con el modo «Disparo y más» para seleccionar la mejor imagen, la mejor cara, aplicar el modo Drama, aplicar la Goma de Borrado, etc.
- Estudio de videoclip, que permite combinar varias imágenes creando un vistoso vídeo
- Recortadora de vídeo, que permite rotar y recortar vídeos grabados con el teléfono
La reproducción de vídeo es excelente y el teléfono es capaz de reproducir sin problemas ficheros HD 1080p compatibles con suavidad gracias a su procesador de cuatro núcleos.
Para comprobar la compatibilidad con diversos formatos de audio y vídeo, hemos sometido al Samsung Galaxy S5 a una completa batería de vídeos de prueba (todos ellos de corta duración y con formatos un tanto extraños):
Fichero | Pantalla | Codec | Codif. | Bitrate | Audio | Subs |
Birds.mkv | 1080p |
H.264 | [email protected] |
40 | – | – |
HDDVD.mkv | 1080p | VC1 | AP L3 |
18 | AC3 | – |
Monsters.mkv | 1080p | H.264 | [email protected] | 10 | DTS | Sí |
Suzumiya.mkv | 720p | H.264 | [email protected] | 3 | Vorbis | Sí |
Matrix.mkv | 480p | XVID | AS L5 | 1 | HE AAC | Sí |
Potter.mkv | 720p | H.264 | [email protected] | 0.6 | Dual |
– |
Planet.mkv | 720p | H.264 | [email protected] | 6 | AC3 | Sí |
Shrinkage.mp4 | 720p | H.264 | [email protected] | 3 | AAC | – |
Shrinkage2.mkv | 720p | H.264 | [email protected] | 3 | AAC | – |
Planet 2.mp4 | 720p | H.264 | [email protected] | 6 | AC3 | – |
A continuación hemos incluido los resultados de las pruebas efectuadas. Como se puede apreciar, este reproductor es bastante completo ya que permite escoger pistas de audio, soporta subtítulos en el propio fichero de vídeo, pero no reproduce pistas de sonido AC3 ni DTS.
Curiosamente el Galaxy S4 sí que era capaz de decodificar sonido AC3, por lo que quizás sea una medida de Samsung para luchar contra la piratería.
Fichero | Vídeo | Audio | Subs | Comentarios |
Birds.mkv | No | – | – | No se reproduce |
HDDVD.mkv | No | No | – | No se reproduce |
Monsters.mkv | Sí | No | Sí | No se escucha el audio |
Suzumiya.mkv | Sí | Sí | Sí | – |
Matrix.mkv | No | – | – | No se reproduce |
Potter.mkv | Sí | Sí | – | Permite cambiar pista |
Planet.mkv | Sí | No | Sí | No se escucha el audio |
Shrinkage.mp4 | Sí | Sí | – | – |
Shrinkage2.mkv | Sí | Sí | – | – |
Planet 2.mp4 | Sí | No | – | No se escucha el audio |
Cámara de fotos
La cámara de fotos se ha convertido en uno de los principales elementos de diferenciación para los fabricantes de teléfonos Android de gama alta. Así por ejemplo HTC ha apostado en su último teléfono estrella, el HTC One M8, por su cámara Dual, mientras que Sony sigue incorporando sensores de gran resolución y calidad en sus teléfonos de gama alta, como el Sony Xperia Z2.
Samsung ha optado por incrementar la resolución de la cámara, que pasa de los 13MP del Galaxy S4 a los 16MP, así como aumentar el tamaño del sensor, que se incrementa de 1/3.06″ a 1/2.6″. Lamentablemente no incorpora estabilización óptica de imagen, sino que se basa en software como veremos más adelante.
El Galaxy S5 posee flash pero es de un tono único con un único LED, lo cual normalmente no produce buenos resultados. Otros teléfonos de gama alta como el HTC One M8 o el iPhone 5s poseen dos LEDs de distintos tonos que se combinan de forma inteligente.
Centrándonos en el sensor, como podemos ver en la tabla adjunta, el tamaño de píxel del sensor del Galaxy S5 no es muy grande, por lo que las fotografías con poca luz deberían mostrar bastante ruido. Ahora bien, el nuevo sensor que incorpora el Galaxy S5, denominado ISOCELL, ha sido fabricado por la propia Samsung, a diferencia de los anteriores que eran de Sony.
La compañía afirma que este sensor posee una nueva arquitectura que crea una barrera física entre los píxeles del sensor para reducir el ruido a altos niveles de sensibilidad ISO. Samsung estima una mejora de un 30 por ciento.
En cuanto al interfaz de la cámara, este ha sido simplificado y nos recuerda al diseñado por Google que viene en el Nexus 5.
Samsung ha destacado dos funcionalidades en la pantalla principal de captura: enfoque selectivo y HDR.
Enfoque selectivo captura varias imágenes con distintos enfoques para poder ajustar a posteriori qué parte de la imagen debe aparecer enfocada. Para ello, una vez que hemos tomado la foto, podemos elegir entre enfoque cercano, enfoque lejano o enfoque panorámico. Este último enfoque combina las capturas tomados para que todas las partes de la imagen, cercanas y lejanas, estén completamente enfocadas.
Aunque la idea del enfoque selectivo suena interesante, en mi opinión presenta algunos problemas. En primer lugar, la cámara mucho tarda más tiempo en capturar una foto, ya que posiblemente está tomando dos (o más) capturas con distintos enfoques. En segundo lugar, este modo requiere que el sujeto esté a menos de 50 cm y no siempre funciona: en ocasiones obtenemos un mensaje diciendo que no ha podido aplicar el efecto porque «el sujeto no se ha detectado.»
Por tanto, posiblemente este sea uno de esos efectos que solo utilizas las primeras veces por curiosidad y cuando enseñas el teléfono a tus amigos.
A continuación podemos ver una imagen tomada con el modo Enfoque selectivo, y cómo podemos elegir entre el enfoque cercano (faro del coche), enfoque lejano (trenes del fondo) o enfoque panorámico.
El modo HDR en tiempo real sí que resulta mucho más útil, ya que combina capturas con varias exposiciones para ampliar el rango dinámico de la imagen resultante. En la práctica esto se traduce en que las zonas oscuras no salen tan negras ni las brillantes aparecen tan blancas.
La novedad que incorpora el Samsung Galaxy S5 es que permite visualizar el resultado en tiempo real en la pantalla.
Normalmente otros teléfonos realizan el procesado HDR a posteriori, por lo que no sabemos cuál va a ser el resultado hasta después de tomar la foto.
Además el Galaxy S5 es capaz de grabar vídeos con HDR.
Samsung sigue incorporando diversos modos de disparo – Automático, Beauty Face, Disparo y más, Panorama, Recorrido Virtual, Cámara Dual – pero por suerte ha reducido el número de modos respecto al Galaxy S4.
Ahora bien, si eres un fan de los modos, no debes preocuparte: Samsung permite descargar nuevos modos de disparo de su tienda, como Animated Photo, Surround shot, Sports shot, Sound & shot o Sequence Shot.
Todos estos modos son ya conocidos y dimos buena cuenta de ellos en nuestro análisis del Samsung Galaxy S4, a excepción del modo Recorrido Virtual. Este modo permite realizar capturas mientras nos desplazamos para crear un recorrido virtual del entorno en el que nos encontremos. Puede ser útil para crear recorridos virtuales de un piso que pongamos a la venta, por ejemplo.
A continuación podemos ver un ejemplo de Recorrido Virtual grabado en el Planetario de Madrid:
[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=vOesRH5qNK4]
En cuanto a la rapidez de la cámara, el arranque de la aplicación Cámara es un poco lento ya que puede tardar de 2 a 3 segundos en estar preparada. Esto es un tiempo superior a lo que encontramos en otros teléfonos de gama alta, aunque es posible que Samsung lo mejore en posteriores actualizaciones de software.
Una de las características que destaca Samsung de esta cámara es la rapidez de enfoque gracias a que suma la detección de fase a la habitual de contraste, y realmente es muy rápido. En general las fotos que hemos tomado han salido enfocadas, por lo que no tenemos nada que reprochar en este aspecto.
Samsung permite realizar algunos ajustes manuales sobre la cámara, como el ISO (Auto, 100, 200, 400 y 800), modo de medición (centro-compensando, matriz o punto), exposición (-2.0 a 2.0) y balance de blancos (auto, luz del día, nublado, incandenscente y fluorescente).
Sin embargo los fotógrafos más avanzados echarán de menos poder controlar la velocidad de disparo, enfocar manualmente o disponer de más opciones de balance de blanco. Otros teléfonos, como el HTC One M8 o el Nokia Lumia 930 ofrecen más opciones que el Samsung Galaxy S5, aunque el usuario típico no las echará de menos.
A continuación vamos a comparar la calidad de las imágenes captadas por el Samsung Galaxy S5 (16MP) con las capturadas por el Sony Xperia Z1 Compact (20MP) y el iPhone 5s (8MP). Además hemos tomado la misma imagen con una réflex digital Nikon D300 (12MP).
En primer lugar hemos querido probar la resolución de los sensores y para ello hemos ampliado la misma zona de una imagen capturada por todas las cámaras.
Como se puede apreciar, los 16MP del Samsung Galaxy S5 permiten apreciar bien los detalles del edificio. Sorprendentemente el detalle captado parece incluso superior al que ha capturado el Sony Xperia Z1 Compact, a pesar de que la resolución del sensor es superior. La menor resolución del iPhone 5s y de la cámara réflex pasan factura.
A continuación hemos repetido la misma prueba en una escena nocturna para apreciar el rendimiento del sensor con poca luz. En esta ocasión la mayor calidad la ofrece la cámara réflex, como era de esperar por su sensor de mayor tamaño. Sin embargo el Galaxy S5 ofrece un resultado bastante razonable, a la par del Sony Xperia Z1 Compact.
Como comentábamos antes, el Galaxy S5 no posee establización óptica pero sí que incorpora estabilización por software. Esta funcionalidad se activa desde el menú de opciones y funciona capturando varias imágenes y combinándolas de forma inteligente. El inconveniente que tiene es que es necesario mantener el teléfono inmóvil durante unos cinco segundos y, por supuesto, que el sujeto fotografiado también esté quieto durante ese tiempo.
A continuación podemos ver una muestra de la misma escena tomada sin/con estabilización por software, que presenta unas diferencias muy apreciables en cuanto a la cantidad de ruido.
Aquí os dejamos con una galería casi 70 fotografías tomadas con el Samsung Galaxy S5 en tamaño original para que podáis apreciar la calidad de las imágenes en una gran variedad de situaciones.
El Samsung Galaxy S5 es uno de los pocos teléfonos capaces de grabar vídeo 4K, si bien no parece probable que aprovechemos esta funcionalidad hasta dentro de unos años, cuando los televisores de esta resolución se popularicen. Además los vídeos en este formato ocupan mucho más espacio, por lo que hay que tener cuidado de no agotar el almacenamiento interno con este tipo de vídeos.
Por otro lado la grabación en 4K no permite alguna de las funcionalidades que sí que están disponibles con resoluciones inferiores, como estabilización de vídeo, HDR y captura de imágenes durante la grabación.
A continuación podéis ver un vídeo 4K grabado con el teléfono, donde se aprecian perfectamente los detalles:
[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=Sdbq5HfdGUM]
Por último, también es posible grabar vídeos a cámara lenta a 120 fps, aunque solo a 720p y dado que la cantidad de luz que se captura en cada imagen es menor, la calidad del vídeo también sufre.
La cámara frontal es de tan solo 2 megapíxeles y no parece haber mejorado respecto a la del Galaxy S4. Funciona bien con buena luz pero produce bastante ruido en otras condiciones. Nos ha gustado más la cámara frontal del HTC One M8, que posee 5 MP de resolución.
Llamadas de voz
En las pruebas que hemos realizado la calidad de la voz es correcta y hemos podido mantener perfectamente conversaciones en entornos moderadamente ruidosos sin dificultades.
Precio
El Samsung Galaxy S5 es un teléfono de gama alta, por lo que su precio es de los más elevados. En Amazon España podemos encontrarlo por [amazon asin=B00JF6EZ1U&template=precio&chan=default].
Otras opciones interesantes si estás evaluando un terminal Android de gama alta son el Sony Xperia Z2 ([amazon template=precio&chan=default&asin=B00IMGIR1I]), el HTC One M8 ([amazon template=precio&chan=default&asin=B00J8U53XW]), o incluso el LG G2 ([amazon template=precio&chan=default&asin=B00EQ8Y7AG]) del año pasado.
Conclusiones
El Samsung Galaxy S5 no se aleja demasiado de lo que ya vimos en el modelo anterior. La compañía coreana ha preferido una vez más apostar sobre seguro y no ha arriesgado demasiado con este nuevo modelo, que incorpora algunas funcionalidades nuevas pero pocas que no hayamos visto antes en otros teléfonos.
Aunque los rumores apuntaban en su día a un cuerpo de metal, Samsung sigue fiel al uso del plástico a pesar de las críticas por ser un material poco sofisticado. Particularmente a mí no me parece que estéticamente el Galaxy S5 sea un teléfono feo, aunque es verdad que no es tan vistoso y carece de un aspecto premium como el del iPhone 5s o HTC One M8.
En el aspecto de novedades, encontramos un lector de huella dactilar que funciona bastante bien, aunque en nuestra experiencia el del iPhone 5s reconoce la huella al primer intento en más ocasiones. También encontramos un sensor de ritmo cardíaco, si bien posiblemente no sean muchos los usuarios que lo aprecien. Y por último es resistente al agua y el polvo, algo que no siendo novedad en el mercado debería ser incorporado por todos los fabricantes.
En cuanto a aspectos más cotidianos, la pantalla que incorpora es posiblemente la mejor que hemos visto, a pesar de que no posea una pantalla QHD 4K como en su día se rumoreaba. Por otro lado el rendimiento del teléfono es espectacular y encabeza prácticamente todos los rankings, como era de esperar al incorporar el procesador más rápido del momento.
La cámara tampoco sale mal parada, ya que las imágenes capturadas poseen muy buena calidad , especialmente en condiciones de buena luz, y graba vídeos 4K.
Echamos en falta que la cámara no incorpore estabilización óptica real, algo que ya incorporan diversos teléfonos de gama alta, para que las fotografías con poca luz tengan menos ruido.
Además Samsung ha incorporado algunas funcionalidades software interesantes en la cámara, entre las que cabe destacar el HDR en tiempo real, que no habíamos visto hasta ahora.
En el apartado de aplicaciones nos alegra comprobar que Samsung no ha añadido nuevas aplicaciones de dudoso uso aunque todavía mantiene y evoluciona algunas a las que veo poco interés como Group Play, ChatOn o S Voice.
Mención aparte merece My Magazine, una nueva función de agregación de contenidos basada en Flipboard que hace su debut en el Galaxy S5, y a la que no he acabado de cogerle el gusto, debido a las pocas opciones de personalización que posee.
En cuanto a funcionalidades más cercanas al sistema operativo, el Galaxy S5 incorpora algunas interesantes como la Caja de Herramientas, el Multi-Window, el modo de ultrahorro de energía y cambio de Smart Network, por citar algunas. En este sentido Samsung ha hecho un buen trabajo de mejora del sistema Android.
En conclusión, el Galaxy S5 es un excelente teléfono que equilibra adecuadamente diseño, potencia y funcionalidades, y que llevaríamos con mucho gusto en nuestro bolsillo como nuestro teléfono principal a pesar de que su apariencia no sea tan elegante como otras opciones.
Ahora solo nos queda esperar que el rumoreado Galaxy S5 Prime sea real y pronto podamos ver un terminal con todas las bondades del Galaxy S5 pero un acabado más premium.
Lo mejor:
- Pantalla Full HD 1080p de 5,1″ con densidad de 432 ppp, que muestra colores vivos, amplios ángulos de visión, elevado brillo y negros más profundos que otros terminales.
- Rapidez y cero parones gracias a un potente hardware: procesador Qualcomm Snapdragon 801 con cuatro núcleos a 2,5 GHz y 2 GB de RAM.
- Cámara de 16MP con un enfoque muy rápido, un rendimiento bueno y funcionalidades sofware interesantes como HDR en tiempo real
- Batería reemplazable que ofrece una gran autonomía, y puede extenderse todavía más con el nuevo modo de ultra-ahorro de energía
- Mejoras interesantes al sistema operativo como Cajón de Herramientas, Multi-Window, Modo Privado, Smart Network, etc.
Lo peor:
- Construcción basada en plástico, a diferencia de otros móviles de gama alta de HTC, Sony o Apple que utilizan materiables más sofisticados
- Sensor de huella dactilar que presenta algunas dificultades para reconocer la huella a la primera en buena parte de los intentos
- Rendimiento de la cámara mejorable, especialmente en condiciones de poca luz ya que no posee estabilización óptica de imagen (sino únicamente por software) ni flash de dos tonos
- Tapa del conector micro-USB de alimentación difícil de retirar cuando es necesario cargar el dispositivo
- Sensor de ritmo cardíaco poco útil en la práctica al no poder medir fácilmente durante un ejercicio sino únicamente en reposo
- Altavoz interno de pequeño tamaño que ofrece una calidad de sonido mejorable
Nota: El teléfono Samsung Galaxy S5 ha sido cedido amablemente por Samsung para la realización de este análisis.
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