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Apple no solo se enfoca en la creación de dispositivos innovadores y atractivos, sino también en asegurar que estos productos tengan una vida útil prolongada y ofrezcan una experiencia satisfactoria a largo plazo. Ahora, la compañía ha publicado un documento llamado «Longevidad, por diseño.»
En Apple, la longevidad de los productos se aborda desde múltiples ángulos, incluyendo el diseño inicial, la fabricación, y el soporte continuo de software. John Ternus, Vicepresidente Senior de Ingeniería de Hardware de Apple, enfatiza que «diseñar los mejores productos y los más duraderos del mundo requiere encontrar un equilibrio entre durabilidad y reparabilidad, mientras se proporcionan actualizaciones de software continuas»
Apple diseña sus productos para soportar el uso diario y minimizar la necesidad de reparaciones. Un ejemplo es el iPhone 15, que presenta una estructura de chasis completamente nueva que facilita la reparación del vidrio trasero, reduciendo el coste de reparación para los clientes en más de un 60%.
Este enfoque no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también contribuye a reducir el impacto ambiental al aumentar la vida útil del dispositivo.
El soporte de software es un pilar clave en la estrategia de longevidad de Apple. La empresa se ha comprometido a proporcionar actualizaciones de software y seguridad durante años, incluso después de que un producto ya no pueda actualizarse con el sistema operativo más reciente. Por ejemplo, en marzo de 2024, Apple lanzó una actualización de iOS 15 para productos tan antiguos como el iPhone 6s, introducido en 2015. Esto asegura que los dispositivos sigan siendo funcionales y seguros durante más tiempo.
Apple ha adoptado varios principios para hacer que sus productos sean más reparables sin comprometer la durabilidad. Esto incluye el uso de adhesivos avanzados que permiten la sustitución fácil de baterías y la implementación de módulos reparables en el iPhone 15, que incluyen la batería, la pantalla y las cámaras. Además, Apple está mejorando la reparabilidad de otros dispositivos como MacBooks, iPads y Apple Watches.
Para garantizar la durabilidad, Apple realiza pruebas rigurosas que simulan el uso real de los dispositivos. Estas pruebas incluyen exposición a líquidos, productos químicos, luz UV intensa y materiales abrasivos, así como pruebas de resistencia a vibraciones y caídas. Estas pruebas están diseñadas para asegurar que los productos de Apple sean confiables en las situaciones cotidianas.
Otro aspecto importante de la estrategia de longevidad de Apple es el valor de reventa de sus productos. Los dispositivos Apple tienden a mantener su valor mejor que los de la competencia, lo que fomenta la reutilización y el reciclaje. En mercados como Estados Unidos y Europa, los iPhones retienen al menos un 40% más de su valor en comparación con los smartphones Android. Este valor sostenido facilita que los productos Apple sean pasados a nuevos usuarios, extendiendo aún más su vida útil.
En conclusión, el compromiso de Apple con la longevidad de sus productos solo beneficia a los usuarios, proporcionando dispositivos duraderos y confiables, sino que también tiene un impacto positivo en el medio ambiente al reducir la necesidad de reemplazos frecuentes.