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Apple se enfrenta a un desafío en uno de sus mercados más grandes: China. Las nuevas leyes de frecuencia de radio en este país prohíben la venta del cargador inalámbrico MagSafe, lo que podría tener importantes implicaciones para la compañía.
El Ministerio de Industria y Tecnología de la Información de China ha actualizado sus regulaciones de gestión de frecuencia de radio, restringiendo el uso de ciertos tipos de cargadores inalámbricos. Estas nuevas normativas, que entrarán en vigor el 1 de septiembre, permiten solo tres bandas de frecuencia en el país: 100-148.5 kHz, 6765-6795 kHz y 13553-13567 kHz.
Además, se ha establecido un límite máximo de potencia de 80W para los dispositivos que operan en estas frecuencias.
El cargador MagSafe de Apple, que opera a 360 kHz, se encuentra fuera de las bandas permitidas por las nuevas regulaciones. Aunque la carga basada en Qi para iPhones de Apple sigue limitada a 7.5W y opera a 127.7 kHz, lo que cumple con las normativas chinas, el MagSafe no podrá comercializarse bajo estas condiciones.
Implicaciones para Apple y su estrategia en china
La implementación de estas leyes tiene como objetivo «evitar interferencias perjudiciales en las operaciones de radio» y «mantener el orden en el espectro radioeléctrico», según el regulador chino.
A partir de la fecha de vigencia, quedará prohibida la producción local o importación de cargadores inalámbricos que no cumplan con los requisitos establecidos. Sin embargo, los productos vendidos antes de la fecha límite no se verán afectados.
Apple se encuentra ahora en una encrucijada. La primera opción es detener la venta de cargadores MagSafe en China, un mercado que representa una parte significativa de sus ingresos y producción. Sin embargo, dado que gran parte de los accesorios de Apple ya se fabrican en China, la compañía podría optar por desarrollar una versión modificada del MagSafe que cumpla con las normativas locales.
El mercado chino y la competencia en la carga inalámbrica
China no solo es uno de los mercados más grandes de Apple, sino también un socio clave en la gestión de su cadena de suministro. A pesar de las nuevas restricciones, es poco probable que los consumidores chinos dejen de comprar iPhones debido a la falta de compatibilidad con el MagSafe.
El camino que Apple decida tomar en respuesta a estas nuevas regulaciones será crucial para su posición en el mercado chino. La opción de desarrollar un MagSafe adaptado a las normativas locales podría mantener su relevancia en el mercado, aunque implicaría costos adicionales de desarrollo y producción.
Por otro lado, la posible retirada del MagSafe de China podría afectar la percepción de la marca, aunque es improbable que tenga un impacto significativo en las ventas de iPhones, dado el creciente ecosistema de carga inalámbrica disponible en el país.