Crean un reloj de pulsera con una pila que dura más de una década

El mundo de los relojes de pulsera ha experimentado una transformación desde la aparición de los relojes electrónicos de cuarzo en la década de 1970. Mientras que los smartwatches han dominado los mercados recientes, la empresa francesa SilMach ha introducido una innovación revolucionaria: MEMS Box, un avanzado motor de reloj de pulsera con sistemas microelectromecánicos (MEMS) de silicio.

Al frente de esta tecnología pionera están los codirectores ejecutivos de SilMach, Pierre-Francois Louvigne y Jean-Baptiste Carnet. Su creación, MEMS Box, redefine el movimiento convencional de los relojes, ofreciendo una eficiencia y longevidad sin precedentes.

A diferencia de los arcaicos motores que han impulsado los relojes analógicos durante décadas, este nuevo motor basado en MEMS promete una duración de la pila de hasta una década, en claro contraste con las sustituciones de pila habituales que se requieren cada pocos años.

Cabe preguntarse por la importancia de crear un motor eléctrico diminuto para relojes analógicos, especialmente en medio de la oleada de smartwatches. Louvigne aclara su estrategia: dirigirse al mercado de los smartwatches híbridos. Este segmento de mercado, distinto de los smartwatches totalmente digitales, integra funcionalidades electrónicas al tiempo que conserva la elegancia de los relojes tradicionales.

Con empresas como Withings, Garmin y Fossil adentrándose en este espacio híbrido, MEMS Box de SilMach pretende revolucionar el intrincado mundo de la tecnología de los relojes de pulsera. Estos relojes híbridos presentan una mezcla de estética analógica y modernas pantallas electrónicas, incorporando diversos sensores y motores.

Sin embargo, MEMS Box de SilMach destaca por su compacidad y eficiencia, que permiten reducir considerablemente el volumen de la caja del reloj, dejando así más espacio para funciones adicionales o una mayor duración de la batería.