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Más de 800 presuntos delincuentes ha sido detenidos tras convencerles de que utilizaran una aplicación de mensajería cifrada, que estaba gestionada de forma encubierta por el FBI.
El FBI colaboró con la policía australiana y europea para crear la app de mensajería cifrada AN0M. Consiguió que los presuntos delincuentes la utilizaran y vigiló sus conversaciones.
Las comunicaciones cifradas incluían supuestamente tramas de asesinatos, tráfico masivo de drogas y distribución de armas.
La operación fue conocida como Trojan Shield en Estados Unidos y Europa, y Operación Especial Ironside en Australia. Expuso a presuntos delincuentes de cárteles de la droga sudamericanos, grupos de la Tríada asiática y grupos criminales de Oriente Medio y Europa.
Fue concebida por el FBI y la policía australiana en 2018, «tomando un par de cervezas», dijo a la prensa el comisario de la Policía Federal australiana Reece Kershaw.
«Las plataformas de comunicaciones criminales cifradas han sido tradicionalmente una herramienta para evadir la aplicación de la ley y facilitar el crimen organizado», dijo Calvin Shivers, director adjunto de la División de Investigación Criminal del FBI, en un comunicado.
«El FBI y nuestros socios internacionales siguen ampliando los límites y desarrollando formas innovadoras de superar estos retos y llevar a los delincuentes ante la justicia»