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La semana pasada, Tesla organizó su Día de la Inteligencia Artificial, un evento retransmitido en directo donde la compañía presentó sus últimos avances técnicos sobre inteligencia y visión artificial.
Sin embargo, el optimismo que mostró Musk en ese evento, contradice sus últimas declaraciones en Twitter.
En un tweet publicado ayer, Elon Musk dijo;
En mi opinión, la beta 9.2 de FSD (Full Self Driving) realmente no es tan buena, pero el equipo de Autopilot/AI se está reuniendo para mejorar lo más rápido posible.
Estamos tratando de tener una sola pila de tecnología tanto para las carreteras como para las calles de la ciudad, pero requiere un reentrenamiento masivo [de la red neuronal].
El punto que comenta Musk es totalmente cierto, ya que es muy complicado entrenar a un sistema para conducir tanto en una ciudad como en una carretera.
Don Burnette, cofundador y director general de Kodiak Robotics, empresa epecializada en la conducción autónoma de camiones, afirmó algo similar en una entrevista reciente.
Uno de los aspectos únicos de nuestra tecnología es que está altamente personalizada para un objetivo específico.
No tenemos el requisito constante de mantener un rendimiento muy alto en las carreteras para camiones y, al mismo tiempo, un rendimiento muy alto en los circuitos urbanos, todo dentro de la misma pila y el mismo sistema. En teoría, es posible crear una solución genérica para toda la conducción en todas las condiciones y con todos los factores de forma, pero es un problema mucho más difícil.
Dado que Tesla sólo utiliza cámaras ópticas, sin hacer uso de tecnologías LiDAR o radar, el entrenamiento «masivo» de las redes neuronales es muy necesario.
Este es un momento singular de claridad y honestidad para Musk. Normalmente, tenemos que filtrar las noticias de Tesla sobre su conducción autónoma por un excesivo optimismo.
Musk siguió el tuit diciendo que acababa de conducir el FSD Beta 9.3 desde Pasadena hasta el aeropuerto de Los Ángeles, un viaje que había «¡mejorado mucho!»
Tal vez Musk esté tratando de desviar la atención de la oleada de mala prensa sobre el sistema FSD. La semana pasada, los reguladores de Estados Unidos abrieron una investigación preliminar sobre el Autopilot de Tesla, citando 11 incidentes en los que los vehículos chocaron con vehículos estacionados.