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Una startup tunecina llamada Kumulus ha desarrollado un dispositivo que imita el proceso de condensación para convertir la humedad del aire en agua potable.
Alimentado por paneles solares, Kumulus 1 tiene el tamaño de un sillón grande y puede producir entre 10 y 50 litros de agua limpia al día, dependiendo de los niveles de humedad del aire.
Por ahora, se han desplegado tres dispositivos en Túnez y París, donde se están probando. Pero en las tres semanas transcurridas desde su lanzamiento, la startup ya ha recibido más de 100 pedidos anticipados, por valor de unos 700 millones de dólares, de clientes de Francia, Italia, México y Uruguay.
Kumulus está a pocos meses de salir al mercado.El aire húmedo entra automáticamente en la máquina a través de pequeñas aberturas en la parte superior y pasa por un filtro inicial. Luego se enfría en una cámara que condensa la humedad del aire y la convierte en rocío. El agua se filtra de nuevo, se mineraliza y se almacena en un depósito de agua.
La máquina sería más eficaz en zonas costeras con mucha humedad, donde podría producir hasta 50 litros en 24 horas..
Una boquilla en el exterior permite acceder fácilmente al agua. Una pantalla, por su parte, muestra la cantidad de agua disponible dentro de la máquina; puede conectarse a una aplicación que permite a los usuarios controlar aspectos como la calidad del agua y cuándo cambiar el filtro.
La compañía no ha querido revelar el coste que ha supuesto para el equipo el desarrollo del producto, ni cuánto costará la máquina en sí, pero dice que se están alquilando dos unidades en Túnez por 99 dólares al mes, incluido el mantenimiento regular y el cambio de filtro cada seis meses. En comparación con el coste del agua en Túnez, que es de 15 céntimos por litro, Kumulus acabará costando entre 8 y 9 céntimos por litro, dice Triki.
Los clientes de Kumulus son hoteles remotos que necesitan una mejor fuente de agua potable, empresas de construcción que quieren fuentes de agua fuera de la red en los edificios.
