🎃 ¡Rebajas de Halloween! ¡Office 2021 para siempre por sólo 29,11€/PC! [ Saber más ]
General Motors ha anunciado que ha dejado de compartir detalles sobre cómo conducen las personas sus vehículos con dos brokers de datos que creaban perfiles de riesgo para la industria de seguros.
Esta decisión surge después de un informe del New York Times que reveló que G.M. había estado compartiendo datos sobre la cantidad de kilómetros recorridos, frenado, aceleración y velocidad de los conductores con la industria de seguros durante años.
Los conductores fueron inscritos, algunos sin saberlo, en OnStar Smart Driver, una función en los automóviles conectados a Internet de G.M. que recopilaba datos sobre cómo se había conducido el automóvil y prometía distintivos digitales por una conducción segura.
Algunos conductores afirmaron que sus tarifas de seguros aumentaron como resultado de los datos capturados, que G.M. compartió con dos brokers, LexisNexis Risk Solutions y Verisk. Estas empresas luego vendieron los datos a compañías de seguros.
Desde el miércoles, «los datos de los clientes de OnStar Smart Driver ya no se comparten con LexisNexis o Verisk», dijo Malorie Lucich, portavoz de G.M., en un comunicado por correo electrónico. «La confianza del cliente es una prioridad para nosotros, y estamos evaluando activamente nuestros procesos y políticas de privacidad».
Romeo Chicco, un hombre de Florida cuyas tarifas de seguro casi se duplicaron después de que su Cadillac recopilara sus datos de conducción, presentó una queja buscando la condición de acción colectiva contra G.M., OnStar y LexisNexis este mes.
Hasta 2022, más de ocho millones de vehículos estaban incluidos en Smart Driver. Un empleado familiarizado con el programa dijo que los ingresos anuales de Smart Driver para la compañía estaban en el orden de los millones de dólares.
Este movimiento de G.M. destaca la importancia creciente de la privacidad de los datos para los consumidores y la necesidad de una mayor transparencia en cómo se utilizan y comparten sus datos de conducción. La industria automotriz enfrenta desafíos significativos en equilibrar la innovación tecnológica con la protección de la privacidad del consumidor.