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Los Pixel y Pixel XL de Google fueron grandes dispositivos cuando se lanzaron en 2016 ya que marcaron el final de la serie Nexus y un cambio de dirección para Google en varios aspectos.
A día de hoy, los Pixel y Pixel XL todavía gozan de buena salud ya que incluso han recibido la beta de Android Q. Sin embargo, por muy buenos que fueran, también tenían ciertos defectos.
Uno de los problemas más graves estaba relacionado con el micrófono ya que algunos dispositivos Pixel y Pixel XL venían con micrófonos defectuosos.
Google reconoció que había un problema con los micrófonos defectuosos a principios de 2017, cuando la empresa admitió que varios dispositivos tenían una «grieta en la conexión soldada del códec de audio» que causaba problemas con las llamadas y la funcionalidad de Google Assistant.
La compañía intentó solucionar el problema con una actualización de software, pero continuó vendiendo los dispositivos a sabiendas que estaban defectuosos, lo que les valió una demanda de clientes afectados.
Ahora, la demanda ha sido resuelta por 7,25 millones de dólares en Estados Unidos en espera de la aprobación del tribunal, y los propietarios de dispositivos Google Pixel afectados por este problema podrían obtener hasta 500 dólares.
Si el dispositivo fue fabricado antes del 4 de enero de 2017, significa que el dispositivo está cubierto por la demanda y, por lo tanto, es elegible.
De acuerdo con el acuerdo propuesto, si el usuario devolvió su dispositivo Pixel/Pixel XL defectuoso y recibió otro teléfono defectuoso de Google, entonces recibirá la compensación más alta, que es de 500 dólares.
Si el usuario solo tenía un dispositivo defectuoso, entonces puede recibir hasta 350 dólares. Incluso los propietarios de Pixel que no experimentaron ningún problema en absoluto podrían obtener hasta 20 dólares de este acuerdo. | Fuente: The Verge