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Una nueva investigación ha revelado que Google ha estado recopilando datos muy detallados de las llamadas realizadas a través de la aplicación Teléfono y los mensajes de texto intercambiados en los teléfonos Android.
Google utilizó estas aplicaciones de Android para obtener cantidades masivas de datos, y lo ha hecho sin informar a los usuarios ni obtener su consentimiento.
Las nuevas revelaciones proceden de un trabajo de investigación del profesor de informática del Trinity College de Dublín, Douglas Leith.
Los datos enviados por Mensajes de Google incluyen un hash del texto del mensaje, lo que permite vincular al emisor y al receptor en un intercambio de mensajes.
Los datos enviados por Google Dialer incluyen la hora y la duración de la llamada, lo que también permite vincular los dos teléfonos que participan en una llamada telefónica. Los números de teléfono también se envían a Google.
Los hashes codifican el contenido real que obtiene Google, lo que hace casi imposible acceder a él. En este caso, Google no puede ver el texto real, ya que se convierte en un conjunto de letras y números sin sentido. Aun así, con suficientes recursos informáticos y tiempo, alguien podría descifrar algunos de los mensajes más cortos.
Del mismo modo, la app de Teléfono registra las llamadas entrantes y salientes, la hora y la duración de la llamada.
El pasado mes de noviembre, Leith informó a Google de sus hallazgos. Mantuvo varias conversaciones con la empresa sobre el asunto. El investigador ofreció nueve sugerencias que pueden mejorar la privacidad de los usuarios de Android que dependen de la aplicación Teléfono y Mensajes para comunicarse. Google ya ha implementado seis de ellas.