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Un problema de Internet es que la gente puede usar nombres falsos para ocultar su verdadera identidad, lo que a su vez crea problemas ya que los usuarios pueden crear múltiples cuentas para, por ejemplo, dejar falsas críticas negativas sobre un negocio.
En Australia, un dentista no está muy contento con una opinión que dejó un presunto paciente, en la que aconsejaba mantenerse alejado de la consulta dental porque el dentista le había hecho sentir «extremadamente incómodo».
Ahora un juez ha dictaminado que el dentista en cuestión, el Dr. Matthew Kabbabe, tiene derecho a poner una denuncia por difamación y ha ordenado a Google que entregue toda la información disponible sobre la identidad del usuario que dejó la opinión.
Esto incluye detalles personales como el nombre, el número de teléfono y los metadatos de localización. De acuerdo con el abogado de Kabbabe, esto es algo inédito ya que el juez ha considerado que Google es responsable de este tipo de publicaciones online.
«Creo que es extremadamente injusto que se permita a la gente atacar anónimamente a pequeñas empresas honestas y trabajadoras», dijo el Dr. Kabbabe. La opinión en cuestión, cuyo autor es un usuario llamado «CBsm 23», es la única que contiene comentarios negativos en la página del Dr. Kabbabe. El resto de sus reseñas tienen cinco estrellas.
Por el momento, el Dr. Kabbabe no ha tenido éxito en conseguir que Google quite la crítica. «A veces la gente sólo mira una o dos críticas malas y decide ir a otro lugar,» afirma.
Queda por ver si los tribunales australianos podrán o no obligar a Google a entregar información sobre el usuario, ya que se espera que la compañía apele la decisión.
Ver comentarios (1)
los comentarios (o críticas) si son respetuosos y bien argumentados me parece bien que no se puedan borrar. Pero si te entra el típico troll que se crea 4 cuentas y empieza a despotricar, puede hundirte el negocio.