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Ring, fabricante de dispositivos de seguridad doméstica, es uno de los más populares del sector, en parte por el respaldo de su empresa matriz, Amazon.
Estar en todas partes significa ser blanco de conductas maliciosas y,en los últimos años, Ring ha protagonizado bastantes titulares por problemas de seguridad.
La última historia tiene que ver con cámaras de Ring grabando intervenciones de cuerpos especiales de la policía, que fueron engañados para intervenir en hogares con fuerza bajo una falsa denuncia de que se estaba cometiendo un delito.
Dos hombres estadounidenses han sido acusados de piratear las cámaras de seguridad domésticas Ring de una docena de personas al azar y luego informar de un incidente violento en la dirección del objetivo para engañar a la policía local y forzarle a que interviniera con fuerza.
Los fiscales afirman que las dos personas utilizaron los dispositivos Ring infectados para difundir en las redes sociales imágenes de vídeo en directo de las redadas policiales en los domicilios de sus objetivos.
James Thomas Andrew McCarty, de 20 años, y Kya Christian Nelson, de 22 año, conspiraron para piratear cuentas de correo electrónico de Yahoo pertenecientes a víctimas en Estados Unidos. A partir de ahí, los dos presuntamente comprobaban cuántas de esas cuentas de Yahoo estaban asociadas a cuentas de Ring, y luego se dirigían a personas que utilizaban la misma contraseña para ambas cuentas.
En una semana de noviembre de 2020, McCarty y Nelson identificaron y atacaron al menos a una docena de víctimas en todo el país.
Parece que los hackers acusados creían que eran prácticamente intocables, ya que incluso se mofaron de las fuerzas de seguridad a través de los dispositivos Ring hackeados.
Al parecer, Nelson accedió sin autorización a una cámara con timbre Ring, situada en la residencia de los padres de la víctima y vinculada a la cuenta Ring de ésta, y la utilizó para amenazar verbalmente y mofarse de los agentes de policía que acudieron al falso incidente denunciado.