Instalar Windows 10 Technical Preview es lo más parecido a introducir un espía en tu ordenador
La semana pasada, Microsoft nos sorprendió a todos anunciando Windows 10, el sistema operativo que sucederá a Windows 8 (sí, se han saltado un número).
Aquellos que lo han probado han quedado bastante impresionados por esta nueva versión, que puedes descargar e instalar fácilmente. Sin embargo, debes tener en cuenta que utilizar Windows 10 Technical Preview es lo más parecido a tener un espía en tu ordenador, según se recoge en sus términos de uso:
«Microsoft recoge información sobre ti, tus dispositivos, aplicaciones y redes, y tu uso de esos dispositivos, aplicaciones y redes. Algunos ejemplos de los datos que recogemos incluyen tu nombre, dirección de correo electrónico, preferencias e intereses; navegación, historial de búsqueda y archivos; llamadas de teléfono y datos de SMS; configuración de dispositivos y datos de sensores; y uso de aplicaciones.»
Aunque suena bastante inquietante, ese párrafo es bastante parecido a lo que muchas otras compañías recogen en sus términos de uso. Lo mejor está por llegar:
«[Cuando] utilizas funcionalidades de entrada por voz como la conversión de voz-a-texto, podemos recopilar información de tu voz y utilizarla para propósitos como la mejora en el procesado del habla.
[Cuando] abres un fichero, podemos recopilar información sobre el fichero, la aplicación utilizada para abrir el fichero, y cuánto tiempo tarda y utilizarlo para propósitos como la mejora de rendimiento.
[Cuando] introduzcas texto, podemos recopilar los caracteres tecleados y utilizarlos para propósitos como mejorar las funciones de auto-completado y verificación ortográfica.»
En resumen, Microsoft puede escuchar lo que dices, ver tus ficheros, y registrar lo que escribes. Dicho de otra forma, utilizar Windows 10 Technical Preview es abrir la puerta a que la compañía acceda a todos tus datos.
Ahora bien, el hecho de Microsoft se auto-conceda el derecho para hacer todas estas cosas no quiere decir que lo haga para fisgar en tus ficheros, grabar tus conversaciones personales, o guardar un registro todo lo que teclees. O al menos confiamos en que no sea así. | Fuente: Forbes