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El lanzamiento de la familia iPhone 16 ha traído varias novedades interesantes, y una de las más destacadas, aunque no tan publicitada, es la inclusión del formato JPEG XL.
Esta nueva tecnología de compresión de imágenes promete mejorar la calidad visual, a la vez que reduce significativamente el tamaño de los archivos en comparación con el tradicional formato JPEG.
¿Qué es el formato JPEG XL?
JPEG XL es un estándar de codificación de imágenes de nueva generación, que fue formalmente estandarizado en 2022. A pesar de su reciente introducción, este formato ha sido adoptado por numerosos sistemas operativos y aplicaciones.
En el ecosistema de Apple, ya cuenta con soporte en herramientas como Finder, Preview, Final Cut Pro y Safari. También ha sido integrado en software de edición de imágenes como Adobe Camera Raw y Lightroom.
Una de las principales ventajas de JPEG XL es su capacidad para ofrecer una imagen de mejor calidad con un tamaño de archivo más pequeño. Este formato puede ser hasta un 55% más eficiente que el JPEG tradicional, eliminando defectos visuales comunes como los artefactos de compresión.
Ventajas medioambientales y tecnológicas
La eficiencia del JPEG XL no solo tiene beneficios para los fotógrafos y usuarios, sino también para el medio ambiente. Al reducir el tamaño de los archivos sin comprometer la calidad de las imágenes, se disminuye la cantidad de datos almacenados y, por ende, se requiere menos energía para mantener esa información. En un mundo donde la cantidad de datos crece exponencialmente, cada ahorro de energía cuenta.
Además, JPEG XL es compatible con gama de colores amplia y alto rango dinámico (HDR), lo que significa que puede manejar imágenes con colores más ricos y precisos. También admite una profundidad de color de hasta 32 bits por canal, lo que lo convierte en una excelente opción para fotografías de alta calidad.
El formato JPEG XL en el iPhone 16 Pro
La decisión de Apple de incorporar JPEG XL en sus nuevos iPhone 16 Pro y Pro Max no es casualidad. La compañía ha envuelto las fotos en este formato dentro de contenedores DNG, lo que permite conservar la flexibilidad de los archivos ProRAW mientras se reduce su tamaño de manera significativa.
Por ejemplo, una imagen que normalmente ocuparía 32MB en JPEG podría ocupar solo 24MB en JPEG XL sin pérdida y, en su formato «perceptualmente sin pérdida», apenas 5MB.
Sin embargo, JPEG XL aún no es ampliamente adoptado. Aunque Apple lo ha implementado en sus dispositivos más recientes, navegadores como Chrome y Firefox no lo soportan de forma nativa, lo que limita su uso fuera del ecosistema Apple.
Para los usuarios que ya están dentro del ecosistema Apple, el JPEG XL representa una mejora significativa. A largo plazo, se espera que más empresas sigan el ejemplo de Apple y adopten este formato en sus dispositivos. Samsung ya lo ha implementado en sus teléfonos Galaxy más recientes al disparar en Expert RAW, pero la adopción de Apple podría ser el impulso que necesita para convertirse en un estándar.
A pesar de sus beneficios claros, la transición no será instantánea. JPEG XL supera muchos de los problemas del formato JPEG tradicional, como la falta de soporte para HDR y la aparición de artefactos de compresión, pero necesitará tiempo para ser aceptado de manera generalizada.