Nvidia necesita triplicar la producción de Hopper, su GPU de $40.000 que todos quieren
h, mientras la amenaza de escasez pesa sobre las empresas que buscan capitalizar el auge de la IA.
El gigante del chip quiere aumentar la producción de su popular procesador H100, bautizado con el nombre de la científica informática Grace Hopper, con el objetivo de enviar entre 1,5 y 2 millones de unidades el año que viene, frente al objetivo de 500.000 de este año, según Financial Times.
Nvidia alcanzó una capitalización bursátil de 1 billón de dólares en mayo, gracias a la enorme demanda de sus procesadores GPU, un componente fundamental en el desarrollo de grandes modelos de IA que subyacen en herramientas como ChatGPT.
La importancia de los procesadores para el auge de la inteligencia artificial ha provocado una pugna mundial entre empresas e incluso países para asegurarse un buen suministro. A principios de este mes, se supo que Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos habían comprado miles de unidades H100 de Nvidia.
Mientras tanto, las empresas de capital riesgo con capital suficiente para comprar GPUs se han dedicado a adquirirlas para start-ups que desean crear sus propios modelos de inteligencia artificial a partir de los datos que almacenan.
Los procesadores de IA de Nvidia han demostrado ser tan populares que las empresas chinas han estado dispuestas a comprarlos a través de mercados clandestinos en Hong Kong, según informó Reuters en junio, ya que las normas de exportación estadounidenses prohíben a Nvidia vender sus procesadores de gama alta a China.