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Existe la creencia de que es peligroso tener imanes cerca de los aparatos electrónicos, pero ¿pueden realmente dañar el teléfono o el ordenador?
La preocupación por los imanes y los aparatos electrónicos tiene una base científica. Sin embargo, es increíblemente difícil y raro que se dañen los aparatos electrónicos con un imán casero.
La mayoría de los imanes de tu entorno — los imanes de las neveras, los soportes magnéticos de los teléfonos, etc. — son imanes muy débiles. En el extremo opuesto, están los grandes imanes de neodimio y los electroimanes extremadamente potentes que pueden causar problemas a los dispositivos electrónicos e incluso la pérdida de datos.
Pero, a menos que trabajes en un entorno industrial, médico o científico en el que se utilicen imanes muy potentes, y sólo si acercas tus dispositivos a esos imanes cuando están en funcionamiento, hay muy poco riesgo de que vaya a dañar sus dispositivos.
¿Puede un imán dañar mi PC o portátil?
Si tu ordenador tiene un disco duro magnético tradicional (a diferencia de una unidad de estado sólido SSD), siempre existe la posibilidad de que un imán muy fuerte dañe el disco duro. El riesgo es extremadamente pequeño, a menos que te dé por pegar un imán industrial a tu disco duro.
Además, si tu ordenador portátil o de sobremesa sólo tiene unidades de estado sólido, entonces no hay unidad magnética ni datos magnetizados que puedan dañarse.
¿Puede un imán dañar mi teléfono?
A primera vista, la respuesta parecería ser que no, porque ningún teléfono tiene elementos magnéticos, ya sean discos duros o de otro tipo.
Sin embargo, hay casos en los que los imanes pueden causar problemas menores con los teléfonos, aunque no un daño permanente. Los teléfonos utilizan diminutos imanes en su interior para diversos fines, como en las matrices de estabilización de imagen de las lentes. Una funda magnética o una montura con un imán demasiado cerca de los sensores puede inutilizarlos temporalmente.
Problemas similares surgen cuando los imanes están demasiado cerca de los sensores internos de la brújula, ya que pueden causar irregularidades en la lectura de la brújula, lo que lleva a resultados inesperados al utilizar aplicaciones que dependen del sensor de la brújula.
Los soportes magnéticos para coches, las fundas con imanes, etc., suponen muy poco riesgo. De hecho, algunos teléfonos incluso tienen imanes relativamente grandes incorporados, como el anillo magnético MagSafe en la parte trasera de los iPhones modernos.
Si quieres evitar problemas, mira los accesorios magnéticos hechos para tu teléfono por el fabricante o por un socio con licencia. La fuerza y la colocación de los imanes en los accesorios se ajustan cuidadosamente para evitar problemas con el modelo de teléfono en cuestión.
Conclusiones
Si has encontrado este artículo tras ver con pánico cómo tu hijo pegaba imanes de la nevera o juguetes magnéticos a tu portátil o teléfono, no te preocupes. El riesgo es inexistente, y la fuerza de esos pequeños imanes ni siquiera se acerca a la fuerza de los imanes que ya están dentro del disco duro.