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Los marcos alrededor de la pantalla pueden ser un lugar práctico para apoyar los dedos al ver una película o jugar en horizontal, o para colocar cámaras y sensores, pero estéticamente son terribles.
Afortunadamente, ahora estamos en una era en la que las pantallas se extienden por el frontal de nuestros teléfonos casi por completo, solo con pequeñas excepciones (sí, Sony, te estamos mirando a ti 😉).
Un frontal con pantalla de lado a lado es ciertamente agradable a la vista, pero no fue fácil llegar a donde estamos hoy. Los fabricantes inicialmente lucharon por encontrar la mejor manera de implementar un diseño sin bordes, manteniendo al mismo tiempo los diversos sensores y cámaras a los que nos hemos acostumbrado.
Antes de que se popularizaran los orificios en pantalla, los fabricantes de teléfonos se devanaban los sesos buscando la perfección en las pantallas de los smartphones.
La respuesta, al menos por un par de años, fue una batalla entre cámaras emergentes y muescas en la pantalla. Fue una solución provisional mientras la tecnología encontraba una solución mejor. Y así fue. No encontrarás ningún teléfono Android con cámara emergente en estos días.
En 2018, las cámaras emergentes eran ciertamente más atractivas, un mecanismo que podías mostrar a tus amigos, que al principio se maravillaban del movimiento mecánico antes de cuestionar la durabilidad de una característica tan llamativa. Algunos fabricantes incorporaban mecanismos que retraían las cámaras emergentes cuando detectaban una caída, con la esperanza de recogerla antes de que golpease el suelo.
El Oppo Find X fue uno de los primeros teléfonos ampliamente disponibles con una cámara emergente. Su diseño y colores lo hacían atractivo, escondiendo todas sus cámaras en la misma sección motorizada que abarcaba la parte frontal y trasera del teléfono.
OnePlus también adoptó la cámara emergente en su buque insignia en 2019, OnePlus 7 Pro y 7T Pro, destacando con características como la detección de caídas, que retraía automáticamente la cámara emergente si el teléfono se caía mientras la cámara estaba desplegada.
El Xiaomi Mi Mix 3 presentó su propia versión de la cámara oculta. En lugar de una sección motorizada, deslizabas la pantalla con el dedo para descubrir las cámaras selfie duales. Esto hizo que la aplicación de la cámara se lanzara automáticamente.
Aunque la era de las cámaras emergentes fue emocionante, su duración fue corta. El cambio hacia orificios en pantalla o, en menor medida, cámaras bajo la pantalla ha sido una evolución natural, pero es interesante recordar cómo las cámaras emergentes una vez deslumbraron en el mundo de los smartphones.