Todo apunta a que los nuevos Pixel serán muy muy muy difíciles de rootear
En los buenos tiempos, cuando Android 5.0 Lollipop era lo que se llevaba, conseguir ser root en un dispositivo era bastante fácil ya que bastaba con ejecutar alguna herramienta que te daba esos privilegios con un solo click.
Sin embargo, dados los problemas de seguridad que se han dado en Android en los últimos tiempos, Google y los fabricantes han comenzado a cerrar puertas. A día de hoy, es bastante habitual que durante el arranque se verifique que la partición del sistema está inalterada, y algunos fabricantes no permiten que un dispositivo arranque si no pasa esta prueba.
Con Android 7.0 Nougat, Google ha forzado este requerimiento, lo que limita las formas de conseguir acceso root en un terminal. Por ello, los métodos actuales para conseguir ser root evitan modificar el sistema antes del arranque, ejecutando todo el código en un espacio llamado Ramdisk, que es utilizado por el kernel durante el arranque y sobre el que normalmente no se comprueba su paridad.
Sin embargo, el código para Pixel que ha sido encontrado por un miembro de XDA apunta a que el Ramdisk, el kernel y la partición del sistema estarán unidas en un único fichero del sistema. Esto significa que se comprobará la paridad de todo el bloque completo, lo que hará que los métodos actuales basados en modificar el Ramdisk se vuelvan inútiles.
Aunque esta limitación puede superarse modificando el bootloader del dispositivo, bastantes fabricantes bloquean el bootloader de forma permanente, y no sería extraño que esta tendencia se extendiese también a los dispositivos Pixel por motivos de seguridad.
Cualquier dispositivo con un bootloader bloqueado y Android Nougat será muy difícil de rootear, así que si estás pensando en ser root en tu próximo terminal, deberías plantearte optar por una marca que facilite el desbloqueo del bootloader.