Twitter decide dejar de pagar la factura de Google, poniendo en riesgo muchos sistemas internos
La semana pasada, Elon Musk admitió que, a pesar de haber despedido a alrededor del 85% del personal de Twitter en el momento en que se hizo cargo de la empresa y de no pagar el alquiler ni muchas otras facturas, sigue luchando para que la empresa alcance el punto de equilibrio.
Esto es sorprendente, dado que en a época previa a Musk, Twitter fue rentable en 16 de los 20 trimestres anteriores. Obviamente, el hecho de que los anunciantes hayan abandonado la plataforma (sobre todo por culpa del propio Elon Musk) no ha ayudado.
Pero, realmente, lo más increíble es que no pueda hacer rentable el sitio ni siquiera cuando no está pagando las facturas.
Twitter deja de pagar la factura de Google
La última factura que ha dejado de pagar es la de Google Cloud, que aloja una amplia variedad de herramientas internas de Twitter, incluidas algunas de sus herramientas de seguridad.
El informe señala que, al igual que con básicamente todos los contratos de Twitter, Elon ha estado intentando renegociarlos a la baja, pero al menos había seguido pagando la factura de Google, en parte porque Google era una de las empresas que seguía anunciándose en Twitter:
Twitter lleva intentando renegociar su contrato con Google al menos desde marzo. También había retrasado los pagos a Amazon Web Services, lo que llevó a la empresa a amenazar con retener los pagos por publicidad.
En aquel momento, Twitter decidió pagar sus facturas de Google Cloud en vista de que Google era (en febrero) el segundo mayor anunciante de la empresa. Google también paga por la licencia para acceder a los tweets y mostrarlos en los resultados de búsqueda.
No está claro qué ha cambiado, pero en algún momento Twitter dejó de pagar sus facturas en la nube, y ahora está planeando abandonar la plataforma por completo.
Twitter depende en gran medida de Google Cloud para muchas herramientas internas, incluida una herramienta clave para eliminar tanto el material de abuso sexual infantil como bots (dos cosas que Elon ha dicho que eran las principales prioridades, aunque sus acciones indican lo contrario).
Las principales herramientas de detección de spam de Twitter, y los sistemas que utiliza para encontrar extremismo violento y medios de comunicación que contienen gore, se ejecutan en Google Cloud. Lo mismo ocurre con todos los sistemas que registran datos utilizados por el equipo de confianza y seguridad.
Twitter dispone ahora de tres semanas para migrar esas herramientas. Todo lo que no se migre a tiempo corre el riesgo de ser cerrado.